Benjamin Damm

Germanista y desarrollador de software. Quien se pregunta cómo encajan estas cosas, no entiende ni de idiomas ni de código. Con Treno.Finance construyo herramientas para descubrir riesgos en la jungla cripto, antes de que sean lo suficientemente grandes como para robarle el sueño a cualquier inversor.

Antes analizaba poemas, ahora disecciono protocolos DeFi – casi la misma precisión, pero menos poesía. Me gustan las arquitecturas robustas y desconfío por principio de las palabras de moda. ¿IA? Interesante. Pero la sustancia lo es aún más. ¿Stablecoins? Estables hasta que dejan de serlo.

Mis textos son lo contrario a esos artículos suaves y optimistas: prefiero escribir claro antes que amable, inteligente antes que ruidoso, y siempre con un guiño irónico en lugar de una autoridad fingida.

Cuando no estoy cazando medias verdades digitales, desarrollo componentes en Angular y React, reflexiono sobre ciclos de dopamina o busco respuestas semánticas a preguntas que nadie ha hecho todavía.

Si prefieres mensajes claros a frases vacías, estás en el lugar correcto.
A todos los demás, les recomiendo educadamente unas cuantas rondas con ChatGPT.